Hola Dragón,
Dragoncito esta carta sólo es para decirte adiós, fue lindo conocerte, fue lindo volver a ilusionarme como niña de 12 años, aquella que escribe en su cuaderno tu nombre y hace corazones todo el día, todo fue una historia linda muy inocente y tierna a la vez, era lindo sentir caracolitos en la panza que no me dejaban respirar y que aceleraban mi corazón a mil por hora.
Sólo queda decir adiós que te vaya bien y gracias por hacerme volar de esta manera, aunque el aterrizaje creo que fue forzoso, creo que ya era necesario.
Queridos mostros y mostras:
Por culpa del amor Súper Mostra sigue de viaje y se está haciendo esperar, la llegada de Mostro Mono a éstas tierras sureñas ha alterado la rutina de las tres mostras y por eso que el horario de la radio cambiará solo por el día de mañana.
Los esperamos a escucharnos dede las 8:30 de la noche. (hora Perú)
Besos mostrozos
Dos de las mostras
(5 días después)
Chau
decirte que hace mucho tiempo quiero escribirte, es una mentira. Hace más de cuatro años que te borré de mi mundo; del grupo de personas a las cuales les tengo cariño, del grupo de mis amigas y de cualquier lista de gente a la cual le tenga la más mínima simpatía.
¿Por qué te escribo? No lo sé, en realidad no lo sé... quizás porque tú no sabes que estoy peleada contigo, quizás porque no soporto que cuando nos encontramos, cada mucho tiempo, me abraces y me saludes como si siguiéramos siendo amigas inseparables como antes. Pero no es así. ¿No te has dado cuenta?¿Acaso no te has dado cuenta que ya no te llamo? ¿Que ya no te busco? ¿Que ya no me llamas?¿Que ya no organizo tu cumpleaños? ¿Qué ya ni siquiera me llamas para que lo haga? ¿Que ni siquiera nos llamamos para desearnos un frío y triste feliz cumpleaños? Ya no me llamas cuando tienes problemas o cuando te pasan cosas buenas y yo, por supuesto, tampoco lo hago.
¿Entonces? No entiendo, no entiendo porque el cinismo al verme, yo sé que tampoco te miro con cara de odio, pero sabes y siempre has sabido que no soy así, si me saludan, yo saludo, si me abrazan, no empujo. Pero tampoco finjo emoción al verte. Me remito a saludarte con una sonrisa como se hace con los desconocidos.
¿En verdad no sabes por qué me peleé contigo?, claro porque como tú eres tan buena ¡verdad!, todos te quieren y se ríen contigo de tus chistes, te cuenta sus problemas porque eres buena, noble, pequeña y además te pareces a un ratón… ¿Tú hacerle daño a alguien? No creo ¿no? Además si la mala fui yo, si la que hizo cosas a tus espaldas fui yo, yo tuve algo con el chico que te gustaba, yo no te dije nada, yo lo defendí a él, y tú confiaste en mí, me contaste tus cosas y blablabla.
Pero ¿sabes qué? Ahora que miro todo a lo lejos no creo en nada de lo que me dijiste en ese momento. El hombre en cuestión era mi mejor amigo, yo andaba con él de arriba abajo y quien se metió fuiste tú. Además es imposible que no hayas sabido lo que pasaba, todos lo sabían, pero no saber te convenía más. Yo no te conté nada porque en el momento en que pasaron las cosas tú no tenías nada que ver y en todo caso te pedí perdón, te lo conté todo y rompí todo palito que había que romper con él, por ti.
Pero ¿por qué hice eso? Si como dos años después de todo eso, ¿acaso estuviste conmigo cuando en verdad necesitaba a alguien? ¿acaso apareciste cuando te llamé varias veces a decirte que mi abuela se estaba muriendo? ¿acaso me llamaste cuando se murió?... creo que no ¿no? Te excusaste en que habían pasado tantas cosas entre nosotras y que no sabías cómo reaccionar, le contaste a todos que no sabías cómo relacionarte conmigo después de todo lo que había pasado, ¿dos años después? Claro, porque se muere alguien que yo quiero y tú eres la que no sabes cómo reaccionar, qué coherencia, cuánta bondad. Hace más de 4 años que estoy esperando que me digas algo.
No niego que seas un dulce, que el mundo quiera comerte a pedacitos y ser tan bueno como tú. Pero conmigo no lo fuiste y quizás pude haber aceptado muchas cosas… no sé, yo estuve cerca cuando tú lo necesitaste… y, finalmente, eso no importa porque yo no lo hice para que me lo devuelvas. Sólo una cosa, no inventes una amistad donde no la hay ¿ya? No te llames mi amiga si no puedes ni decir que sientes mucho que una “amiga” tuya esté sufriendo.
¿Sabes? cuando te veo a mí también me da nostalgia porque no soy de palo, pero ya no somos amigas y tampoco creo que lo seamos… y sí, me da pena, pero…
Cuídate, no te deseo ningún mal, en verdad espero que estés bien. Pero así de lejos estamos mejor.
Les dejo una canción que me hace acordar a la señorita Gonzáles.