Hoy por algún motivo, recuerdo que hace unos cuantos años, cuando tenía un mejor amigo, al cual quería muchísimo, siendo este mi mejor amigo por cuatro años de mi vida, era una buena persona, sabía que podía contar con él, con sus consejos, con su incomparable manera de ver el mundo desde otra perspectiva, mucho más simple, mucho más práctica, tal vez muchas veces pensé que era bastante radical, pero al mismo tiempo solucionaba todos mis problemas. Era la mejor manera de encaminar mi vida, siempre decía “Mostra Loca no te me loquees y sólo piensa con la cabeza, no te compliques decide entre estas opciones y se firme en tus decisiones”. Muchas veces sentía que me solucionaba mi vida, que nunca podría dejarlo, que mi vida sin él sería complicadísima, que no sabría qué hacer si el por algún motivo no estaba para mí, recuerdo que odiaba sus viajes largos que tenía que hacer cada año, pues ya no podía correr a él, no podía esperar sus respuestas a los pocos segundos por mensaje de texto, sino que sólo me quedaba esperar días para que responda mis mails. Pero qué locura un buen día esa amistad se rompió de la manera más brutal, más dura, más repentina que me podía imaginar y ese día sentí que mi mundo se terminaba, que si bien algún día me preguntaba ¿cómo sería mi vida sin él? ahora sólo me quedaba afrontar la realidad y tan sólo imaginaba cuáles serían sus consejos ante mis problemas.
Pero fue ahí cuando te quise conocer más, es por eso que decidí pegarme más a ti, tal vez compensar aquel vacio que había dejado mi antiguo mejor amigo, tal vez no fue justo para ti, pero creo que ahora podría decir que valió la pena. Recuerdo que habían días en los cuales tenía problemas y sólo te decía: dime qué tengo qué hacer, que muchas veces comía contigo y sólo podía hacer un paralelo entre mi ex mejor amigo y tú, mi nuevo amigo. Te acuerdas que odiaba muchas cosas de ti, pues tenía que desacostumbrarme a algunas cosas para comenzar a acostumbrarme a otras. Hasta que un buen día decidí deliberadamente que tú serías mi mejor amigo, que así sería, recuerdo que estaba más que segura que sería genial. Es así que comenzamos a tomarle cariño a lugares que serían nuestros lugares, a comidas que serían nuestras comidas, a series que serían nuestras series, a costumbres que serían nuestras costumbres, a rituales que serían nuestros rituales, a días que serían nuestros días.
Ahora después de tanto años que han pasado me parece una locura pensar cómo es que me pude pasar la vida sin haberte conocido, sin que seas mi mejor amigo, sin que me sienta respaldad por ti. Pero siempre, como en todas las historias hay un pero, es así que es por eso que va a ser sumamente difícil despedirme de ti, el tener que decirte hasta pronto, pues creo que el cariño que nos tenemos se ha vuelto una enfermedad para mi, pues me haces mucha falta cuando de pronto no estás conmigo. Es así solo me queda citarte al decir que uno no debe depender de nadie, es entonces que no puedo depender de ti y por eso tengo que dar un paso al costado y decirte sigue tu camino, pues estoy segura que no me necesitaras, que estarás bien. Y yo… que te puedo decir, tan solo que te extrañare.
Es así que esta carta es para ti, para decirte gracias por estar en mi vida, gracias por quererme como me quieres, gracias por ser mi mejor gran amigo.
Mostra Loca
3 comentarios:
Guau Mostra Loca te entiendo completamente, yo también tuve un mejor amigo que se fue a vivir a Estados Unidos. Lo más difícil fue afrontar que él ya no iba a ser parte de mi rutina, una rutina que había vivido durante largo tiempo, sino saber que yo no iba a poder estar ahí para él, cuando se sintiera realmente solo.
Buuuu siii es muy triste panconqueso!! pero ya se me pasara!! gracias por tu comentario
Mostra loca
vaya soy un lloron...me gusto transitar esa nostalgia tuya llena de ternura
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